Este mes, en el Hotel Japonès Puigpinós, acogeremos una boda muy especial: una ceremonia de inspiración japonesa.

Aprovechamos esta ocasión única para contarte cómo se celebra una boda japonesa tradicional, y por qué esta forma de entender el amor y el compromiso puede inspirar a muchas parejas, incluso a miles de kilómetros de Japón.

El alma de una boda japonesa

Las bodas japonesas no son solo un acto formal, sino un ritual lleno de simbolismo, respeto y conexión espiritual.

La mayoría de estas ceremonias siguen el estilo shintoísta, la religión tradicional japonesa que venera a los kami (espíritus de la naturaleza y ancestros).

Entre los momentos más representativos se encuentra el san-san-kudo, un ritual de intercambio de copas de sake que simboliza la unión entre las dos familias. Cada persona bebe tres sorbos de tres copas diferentes, en un gesto de purificación, compromiso y equilibrio.

La ceremonia suele desarrollarse en un templo shinto, con un ritmo pausado y solemne. Se recitan oraciones, se realizan ofrendas y todo está acompañado de una estética cuidada, donde nada es casual.

Vestimenta y estética: belleza en la simplicidad

Uno de los elementos más llamativos de una boda japonesa es el vestuario:

• La novia puede vestir un shiromuku, kimono completamente blanco que representa la pureza y la disposición a asumir los valores del nuevo hogar.
  
• El novio suele llevar un montsuki haori-hakama, un conjunto formal negro con el escudo familiar.

Los detalles son esenciales: arreglos florales minimalistas, uso de papel artesanal (washi), música tradicional con instrumentos como el koto o el shakuhachi, y un ambiente donde la calma y la conexión con la naturaleza lo envuelven todo.

Un enfoque diferente del amor y la celebración

Una boda japonesa tradicional pone el acento en el respeto mutuo, la sencillez y la profundidad del vínculo.

A diferencia de las celebraciones más convencionales, aquí no hay excesos: lo importante no es el espectáculo, sino el significado.

Este tipo de ceremonia es ideal para quienes buscan algo más íntimo, simbólico y conectado con lo esencial.

Celebraciones íntimas en un entorno natural

Aunque no estemos en Japón, en el Hotel Japonès Puigpinós sí compartimos muchos de estos valores: el respeto por el entorno, la calma, la atención al detalle y la belleza de lo sencillo.

En nuestro hotel también se celebran bodas íntimas rodeadas de naturaleza, en un espacio que combina tradición rural y estética japonesa.

Con solo 8 habitaciones, ofrecemos la posibilidad de organizar celebraciones pequeñas, personalizadas y con un ritmo diferente.

Contamos con varios espacios para adaptarnos a tu estilo de boda:

• Sala La Pallera: ideal para ceremonias íntimas o celebraciones sentadas de hasta 40 personas (60 de pie), con un ambiente acogedor y elegante.
  
• Zona exterior: perfecta para cócteles y ceremonias al aire libre, con opción de instalar carpas y aprovechar el paisaje natural del Solsonès.
  
• Patio interior: un rincón más recogido, tranquilo y con encanto.
  
• Área de piscina: ideal para momentos especiales durante el evento, con un ambiente relajado y vistas abiertas.

Además, ofrecemos:

• Desayunos y cenas personalizadas con inspiración japonesa y productos locales.
  
• Alojamiento para los novios y familiares más cercanos, en habitaciones de estilo japonès.
  
• Y la posibilidad de trabajar con servicios de cátering externo para comidas más grandes.

Un lugar único para celebrar una boda diferente, en armonía con el entorno y con los valores que de verdad importan.

¿Una boda diferente? Empieza por un lugar especial

Ya sea con inspiración japonesa o simplemente con ganas de algo auténtico, lo más importante de una boda es que refleje quiénes sois.

Si estás buscando un lugar tranquilo, original y con alma para casarte, quizás lo acabas de encontrar.¿Te imaginas celebrando aquí tu día especial?Escríbenos y te contamos cómo podríamos hacerlo realidad.